Con una amplia variedad de verificadores de plagio disponibles en el mercado, hoy más que nunca es importante tener una clara idea de tus necesidades y objetivos pedagógicos a la hora de hacer tu elección.
¿Cuáles son los criterios y preguntas clave a considerar cuando buscas la mejor solución para los estudiantes, educadores y la institución? Y, ¿cómo puede una solución ir más allá de la simple identificación de plagio y también servir como una herramienta formativa? ¿Cómo puede una solución apoyar el noble objetivo de transformar el posible plagio en una oportunidad de aprendizaje?
En Turnitin hemos desarrollado soluciones que verifican la similitud de textos y disuaden el plagio. Una cosa es señalar el posible plagio y otra enseñar a los estudiantes el valor de la escritura original y la citación apropiada. Los profesores no somos policías —somos educadores— y las herramientas que utilizamos deberían apoyar completamente el proceso de escritura.
Este es el escenario ideal: la mejor solución para el plagio es la disuasión y convertir los casos de plagio en oportunidades para facilitar el pensamiento original.
Este es un objetivo ambicioso y sabemos que muchas de estas nociones pedagógicas no son realistas. Pero estamos tratando de cerrar esa brecha entre ideales y realidad. Sí, los profesores requieren una forma de verificar el plagio, punto final. Pero vamos a pensar en otros panoramas. ¿Qué tal si hubiera una herramienta que no sólo verificara el plagio, sino que además apoyara de forma continua a estudiantes y profesores para concebir ideas y pensamientos originales?
Los profesores están acostumbrados a proporcionar estructura a los estudiantes. Pero, ¿qué tal si los profesores pudieran proporcionar esa estructura con ayuda de un software? ¿Qué pasaría si existiera un software que verifique la similitud, pero que también proporcione a los estudiantes oportunidades de aprendizaje formativo que conducen al éxito en la escritura?
Para ponerlo en términos simples, si estás buscando un verificador de plagio que además sustente las bases pedagógicas de la redacción, aquí hay algunas preguntas que deberías hacerte antes de de escoger una solución para tu institución:
- ¿El servicio permite a los maestros proporcionar retroalimentación a los estudiantes en trabajos que han sido identificados como casos potenciales de plagio?
- ¿El servicio ofrece retroalimentación automatizada para ayudar a los estudiantes con la revisión? La comprobación de plagio es importante, pero más importante es disuadirla proporcionando estructura y retroalimentación durante todo el proceso de escritura.
- ¿El servicio sólo verifica el plagio o también facilita el crecimiento del estudiante? ¿Pueden los estudiantes usar el servicio para mejorar sus escritos y abordar cuestiones de citas y parafraseos antes de enviar su trabajo final?
- ¿El servicio se apoya en las mejores prácticas de enseñanza y aprendizaje? ¿El servicio proporciona algún otro recurso para el aula más allá del producto en sí mismo? ¿El servicio ayuda a los maestros a abordar las brechas de habilidades que pueden conducir al plagio?
Es hora de averiguarlo.
¿Buscas más orientación para encontrar el mejor verificador de plagio para tu institución?